El aprendizaje es un proceso inherente a la vida de los seres humanos ya sea de manera inconsciente (sin intención de aprender), o con plena conciencia y voluntad de hacerlo. Resulta indispensable y vital, no se limita a un aprendizaje escolarizado o formal, por el contrario incluye todo aprendizaje en todos los ambientes donde se desarrolla el ser humano (hogar, familia, vecinos, amigos, escuela, medios masivos de comunicación, redes sociales, etc.
¿Qué es aprender?
Existe variedad de concepciones, que dependen de los autores de teorías psicológicas, filosóficas o pedagógicas: conductismo, condicionamiento, por imitación, constructivismo, por mencionar algunos. Por lo tanto definir “aprender” resulta complejo.
Una madre de familia dice a su hija “debes aprender a peinarte” o al hijo “debes aprender a arreglar tu cuarto”, y así podemos pensar en todo lo que alguna vez siendo hijos, escuchamos de nuestros padres.
En estas situaciones se esperaba “ver un resultado” se esperaba un “cambio”, generalmente el aprender significa cambio, ya sea de actitudes, hábitos, habilidades, conocimientos; ese cambio debe ser observable en la vida del sujeto, que su vida sea más completa, mejor que antes de dicho aprendizaje.
Por el contrario, también el niño es impulsor de su aprendizaje cuando solicita respuestas a todo aquello que desconoce ¿Por qué no se cae el sol? ¿Qué es la lluvia? ¿Por qué mi papá tiene barba? ¿Cómo se hace la comida?
mediante el aprendizaje los seres humanos se apropian de la realidad, la integran al acervo personal y desarrollan la capacidad de elaborar una explicación del mundo en torno de ellos
Negrete, 2007, p. 3
En ambos casos habrá un aprendizaje pero, ¿Cuál de ellos permanecerá vigente siendo parte de la vida del niño por más tiempo, en cuál de ellos lo aprendió con mayor gusto? ¿En cuál de los dos ejemplos será necesario estar reforzando o recordando por un agente externo (padres)?
Los motivos para aprender (Actitud ante el aprendizaje)
Seguramente la respuesta a las interrogantes anteriores fue que en el primer ejemplo ese aprendizaje no se mantiene como parte importante de la vida del niño, no lo realiza con mucho gusto y tiene que estar siendo reforzado o recordado constantemente por los padres. Por el contrario las respuestas que los padres dan a sus hijos permanecen y los niños las comparten con sus conocidos “mi papá me dijo, mi mamá me enseñó” …
Es aquí donde debemos incluir el concepto de motivación intrínseca o extrínseca (los motivos que yo tengo para aprender, el interés que me produce ese aprendizaje), Los seres humanos aprendemos por dos razones:
1.- POR NECESIDAD PERSONAL, POR EL PROPIO GUSTO (motivación intrínseca)
2.-PORQUE ES LO QUE ME DICEN QUE DEBO HACER, POR ESTÍMULOS O RECOMPENSAS EXTERNAS (motivación extrínseca).
Este aspecto reviste gran importancia, ya que de él depende, en gran medida, la eficacia y los resultados del aprendizaje. La motivación nos puede aportar respuestas a la situación del aprendizaje escolarizado actual (educación básica),
que nos muestra un panorama donde a un porcentaje muy considerable de alumnos el aprendizaje les resulta aburrido, sin importancia y no les causa gran molestia el hecho de no saber leer (comprensión de textos), resolver problemas (lógica y análisis) o reprobar.
Según Robert J. Marzano, para que se lleve a cabo un verdadero aprendizaje éste debe pasar por el siguiente proceso:
5 Dimensiones del aprendizaje
1.
Las actitudes y las percepciones
Acerca del trabajo y del ambiente en el aula, que permitan al alumno aprender mejor (deben percibir el aula como un lugar seguro, confiable y ordenado. Quitar las actitudes negativas hacia la escuela y las tares escolares)
2.
Procesos
Para que al adquirir e integrar el nuevo conocimiento, los alumnos lo relacionen con lo que ya saben, lo organicen y lo hagan parte de su memoria a largo plazo.
3.
Técnicas y procesos de razonamiento
Para extender y refinar el conocimiento (el conocimiento cambia el conocimiento).
4.
Uso significativo del conocimiento.
El aprendizaje más significativo se logra cuando usamos el conocimiento (La información se vuelve conocimiento cuando puede usarse).
5.
Hábitos mentales
que optimizan el aprendizaje a lo largo de la vida para pensar de manera crítica, con creatividad y regular su comportamiento.
Los expertos en este tema son los licenciados en Pedagogía, capaces de crear los ambientes necesarios para el aprendizaje, de enseñar, guiar u orientar a los alumnos de cualquier edad para que desarrollen esos procesos de análisis, razonamiento y hábitos mentales necesarios para lograr el aprendizaje efectivo, que les brinde las herramientas para desarrollarse en los ambientes laborales, crecimiento personal y la satisfacción de sentirse bien consigo mismo.
Autor: María de Jesús del Río Delgado
Coordinadora de Pedagogía
USJ