Los cambios que se han dado en el comportamiento social como respuesta a los avances tecnológicos, intereses de las nuevas generaciones, gobierno de nuestro país, comportamiento de los medios de comunicación, intereses de las empresas del sector privado; o a nivel familiar la necesidad de que ambos padres de familia trabajen y los hijos pasen sus días en guarderías o colegios de tiempo completo porque ambos trabajan; el continuo estrés de la vida cotidiana o laboral podrían sobrellevarse mejor con unas efectivas relaciones humanas.
Es imposible que todos sintamos, pensemos o actuemos y nos expresemos de la misma manera, sin embargo, hay reglas de convivencia socialmente aceptadas (por todos como un acuerdo no firmado) y que todos los seres humanos aceptamos; porque al final todos buscamos la supervivencia y trascendencia.
Una atmósfera de comprensión y sincero interés por el bien común
Las relaciones humanas deben crear y mantener entre los individuos relaciones cordiales, y vínculos amistosos en una atmósfera de comprensión y sincero interés por el bien común.
Es la forma en la que tratamos a los demás y como los demás nos tratan a pesar de la manera de pensar, desacuerdos o nivel de conocimiento; existe una disposición por servir y ser útil a los demás con humildad y empatía, se trata de una adecuada actitud de disposición, frente a las demás personas, cosas o situaciones que se presenten.
Los valores para crear relaciones efectivas
Para crear relaciones humanas efectivas necesitamos contar con estos valores: respeto, comprensión, cooperación, comunicación, cortesía, para conservar una buena actitud ya que solo existen tres respuestas a los demás.
Y son aceptación como respeto a la otra persona como ser humano único y distinto, rechazo al rechazar podemos herir a otro ser humano y se pierde la relación positiva o descalificación le decimos a otras personas que no nos interesa y no tienen ningún valor, son dos actitudes que lejos de ayudar a las relaciones humanas las quebranta y no permite que haya crecimiento o se llegue a buen término alguna actividad, simplemente no puede existir un vínculo de trabajo en común pues son actitudes dañinas de menosprecio.
Las relaciones humanas en las empresas: factor de crecimiento.
Cuando se toma como bandera la descalificación de otra persona o el rechazo estamos frente a una actitud negativa que con frecuencia termina fracturando las relaciones humanas; consideremos que para que exista una relación cordial ambos seres humanos deben estar en el mismo canal.
Si se trata de una empresa, con mayor razón estas relaciones humanas efectivas deben existir con disposición de colaborar y ayudar al otro pues hay fines comunes; de lo contrario estarían afectando el desarrollo y crecimiento de la empresa.
La empatía y la humildad son básicas para tener relaciones humanas positivas; ¡qué no se nos olvide madurar y crecer cada día y comprender que en esta vida todos nos necesitamos para sobrevivir!
¿Te has puesto a pensar cómo son tus relaciones humanas? Lo ideal es que no seamos nosotros causa para que estas no fluyan.
Redacción IEHP